No estoy inspirada. Y, por si eso fuera poco, ando de un perro que no es normal para nada.
En realidad podría resumir lo que he hecho durante la semana en unos breves puntos: dormir, ver la tele, disfrutar del xiquet, limpieza y demás trabajos ingratos del hogar y curro... vamos, nada del otro mundo, quitando que en este último punto tuve dos días de bronca con una compañera que me han tenido de bastante mala leche, y eso que no soy persona de cabreo fácil, pero esta persona en concreto a veces tiene el don de sacarme de mis casillas.

En fin, quitando lo malo y lo aburrido podría decirse que la parte especial de la semana ha sido mi visita del viernes al ginecólogo, donde se me confirmó lo que ya sabía... que soy una campeonaaaa!!! No solo no he engordado un solo gramo en el último mes, sino que he perdido un kilito (de los míos, no de los de la peque). Así que, por buena chica (que lo mío me ha costado... dios, qué mes más horrible!) se me permite engordar dos kilos en las próximas 4 semanas. Ole y ole! Supongo que no hace falta que diga que lo primero que hice fue comerme un buen plato de pasta con toda su salsita rica, no? Bien, vale, porque lo siguiente será una buena ración de buñuelos con chocolate de esos que en estas fechas inundan la ciudad... que a mi las fallas como que no me van mucho, pero no por eso vamos a dejar de lado la gastronomía típica de la fiesta, je!
Además del tema de la comida, que últimamente no hablo de otra cosa, Lucía está creciendo la mar de bien. Es una niñita muy sana, fuerte y juguetona... no para quieta ni un momento y es de un educado subido, saluda a todo el mundo con sus pataditas y puñetazos varios y, bueno... no es porque sea mi nenita, pero es guapa y simpática como su madre :P

Esta semana Fallas... mamá, miedo! Petardos, calles cortadas, gritos, multitudes de gente abarrotada, música a toda caña hasta las mil, atascos, no ver al xiquet hasta la semana que viene lo menos, llegar tarde a todas partes... lo que la peña llama diversión, vamos. Que dios se apiade de mi!

P.D.- Mmmm... me temo que no era falta de inspiración sino el perrismo familiar lo que me ha atacado :P